Después de haber llegado a un acuerdo con las autoridades municipales por el cierre parcial de vialidades en la zona de El Crucero, comerciantes del crucero darán “dos semanas de tolerancia” para exigir resultados en cuanto a las obras de remodelación.
Y es que, los locatarios de la zona llegaron a un acuerdo esto para modificar el cierre de vialidades y que prácticamente los dejaba aislados en la zona de remodelación, argumentado que eso sólo afectaría sus ventas.
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Comerciantes exigirán resultados.
Ante eso, la Dirección de Tránsito modificó las rutas permitiendo abrir gran parte de la Av. López Portillo y permitir que haya flujo de vehículos y personas hacía la conocida zona del Crucero.
Sin embargo, pese al ajuste de vialidades, los comerciantes no están del todo satisfechos porque querían que el cierre de las vialidades por las obras fuera por etapas. Pero al no ser posible reconocieron que al menos se logró un retorno.
Eduardo Flores, representante de la plaza Las Tiendas de Cancún en la zona del crucero, señaló que aceptaron el cierre parcial pero exigirán resultados por lo que le darán la Secretaría de Obras Públicas (SEOP), “dos semanas de tolerancia” para ver los primeros resultados de la obra.
“Les vamos a dar un voto de confianza y a confiar en su palabra de que tratarán de afectar lo menos posible. Pero si vemos que a la segunda semana le falta más de la mitad, ya veremos qué acciones realizar” advirtió.
Sin embargo, los trabajos de mejoramiento de imagen de esta zona podrían llevarse de entre dos y tres meses, afirmó el titular de la SEOP, William Conrado, por lo que los comerciantes buscarán primero acercarse por la vía del dialogo y de continuar las afectaciones recurrir a marchas o plantones.
“Aún no sabemos qué medidas tomar, pero está descartado el trámite de un amparo pues eso sólo alargaría el tiempo de las obras. Ahora sólo nos queda esperar y darles voto de confianza”, concluyó Flores.
Entre comerciantes, locatarios y ambulantes se estima que en la zona de El Crucero trabajan al rededor de 12 mil personas y obtienen un ingreso directo de entre 200 y 300 familias. Por lo que este cierre representa hasta el 80 por ciento de perdidas en venta diaria.